¿Cómo alimentas tu Cuerpo?
Se dice frecuentemente que somos lo que comemos. Esto significa que si ingerimos alimentos saludables por consecuencia tendremos un cuerpo más saludable, y por el contrario, los alimentos chatarra terminarán acarreándonos diversos problemas de salud.
Aún sabiendo esto, para muchas personas (incluyéndome) resulta más que tentador llevarnos a la boca muchos productos que producen placer inmediato, pero que a la larga terminan dañando nuestros cuerpos.
No solo el cuerpo se alimenta.
Pero las personas no solo estamos formadas por nuestro cuerpo, también somos mentes y espíritus que nos complementan y que nos permiten comunicarnos, crear, observar, trabajar, razonar, etc.
No solo el cuerpo se alimenta, también la mente y el espíritu requieren energía para funcionar, por eso es tan relevante evaluar a conciencia como estamos alimentándolos.
¿Cómo alimentas tu Mente?
La mente se alimenta básicamente, a través del oído y la vista, así que todo lo que perciban estos dos sentidos servirá como materia prima para nuestra mente. Para hacer una evaluación de tu dieta mental deberás hacerte preguntas como las siguientes:
- ¿Qué me estoy repitiendo a mi mismo de manera cotidiana?
- ¿Qué cosas son las que escucho normalmente? ¿Que tan positivas o negativas son?
- ¿Alimento mi mente con conocimientos prácticos o con melodramas de televisión?
- ¿Alimento mi mente con libros y obras de arte o con noticias sobre asesinatos, secuestros y corrupción?
- ¿Cómo son mis conversaciones con otras personas? ¿Cuáles son los temas de los que se habla?
- ¿Cómo son las personas con las que convivo cotidianamente?
- ¿Cuál es mi opinión sobre mi persona, mi familia, mi ciudad, mi país y el mundo entero?
- ¿En qué clase de mundo vivo? ¿Un mundo que se desarrolla ? ¿Un mundo que se destruye?
¿Cómo alimentas tu Espíritu?
Los alimentos del espíritu son también indispensables para el sano desarrollo de las personas y son obtenidos por medio de todos los sentidos:
Algunos alimentos que agrandan nuestro espíritu son:
- Los actos de amor y bondad que haces, que recibes y que observas en otros
- Las lecturas que te inspiran para ser una mejor persona
- La generosidad, el servicio y la contribución, el trabajo en equipo buscando el beneficio común, el deseo de trascendencia.
- Observar y maravillarte con las cosas que existen: la vida, las plantas, los animales, las personas, los planetas, las estrellas, el universo, Dios.
- Las palabras de aliento que te dan o que das a otros.
- La oración sincera y el agradecimiento por todo lo que se te ha dado.
Así como existen alimentos sanos para el espíritu, también existen alimentos que lo dañan.
- El egoísmo
- El Odio
- La Mentira
- Etc.
Como puedes ver, proporcionar una alimentación sana a la mente y al espíritu es igualmente importante que alimentar tu cuerpo. Todas las cosas que pienses, digas, hagas, escuches, comas y bebas terminarán teniendo efectos (buenos o malos) para tu vida.
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